martes, julio 31, 2012

CDN Trail en la Vuelta al Aneto

  Jorge ultima su preparación para el Rogaining de Chequia. En mi caso necesitaba un ensayo general para ir al UTMB con buenas sensaciones. Formamos el equipo ‘CDN Trail’ en la ‘Vuelta al Aneto’. Casi 100 Km., 6.000 m. de ascenso y otros 6.000 m. de descenso. Total 12.000 m. de desnivel acumulado, saliendo y llegando de Benasque.
  El viernes después de comer nos vamos a Benasque y en el hotel de Cerler preparamos los trastos para la prueba. No sé si sería la altura o los nervios por la prueba, pero los dos despertamos habiendo dormido mal y con un ligero dolor de cabeza.
  Desayunamos el correspondiente ‘tuper’ de pasta fría que, como podéis imaginar, a esas horas apetece un montón. Recogemos los dorsales y terminamos de prepararnos. De camino a la salida el café correspondiente. Estamos junto a Fernando, Ángel y Jorge también de casa.
  No tenía ninguna expectativa para la prueba, ninguna previsión de tiempo, pero Jorge hablaba de unas 20 horas aunque tenía en mente menos de 18.
  Salida masiva a las 8:00 desde las calles de Benasque. Casi 300 desatalentados en una mañana calurosa. Atravesando las calles de Benasque corremos junto a la carretera hasta enfilar BalliBierna. Íbamos a toda velocidad; según la pendiente, correr o andar otro por una buena pista que remonta el valle. En esos momentos no podía dejar de pensar que íbamos demasiado deprisa y que el petardazo que pegaríamos iba a oírse por todo el Pirineo.
  El collado de Ballibierna tiene 2.732 m. Así que nos pegamos subiendo un buen rato. Todo el tramo de charla con unos y con otros. Contándonos mentiras y exagerando medias verdades. Hay tiempo para todo. Es la primera subida y vamos frescos; nos marcamos un buen ritmo. A las 11 en el collado (18 Km.), apretamos las zapatillas y para abajo. 
   Bajada disfrutona, algo técnica, hasta el ibón de Llauset. Allí nueva remontada hasta el collado d’Angllos de 2.438m (25 Km.). Bajadón de 1.000 m hasta el embalse de Senet con 1.400m (32 Km.). Tenemos que consultar el track en algún punto para confirmar el camino.
  Jorge va pisando con tanta fuerza que destroza las zapatillas. Un trozo de goma en cada talón cuelga medio suelto. A ver cómo evoluciona pero se le hace muy incómodo.
  A por el Port de Vielha. Jorge piensa que es el punto clave. Llegar arriba en buenas o malas condiciones nos dará la medida de la prueba. Son 1.000 m. de desnivel en subida continua con algunos tramos de gran pendiente. Nos marcamos un ritmo constante y afortunadamente se nubla el día. Hace calor pero no tanto como esperábamos. Al final Fernando se nos va un poco y dejamos de verlo.
  Llegamos a los 2.448 m. a las 15:20 cansados pero con buenas sensaciones (42 Km.). Se empiezan a oír truenos, pero por ahora no están encima nuestra. Se prevé bastante agua a las 20:00 y algo menos a las 21:00. Tormentas de verano típicas del Pirineo. 
  A 1.000 m. de altitud y unos 9 Km. tenemos el único avituallamiento, Vielha y una bolsa con nuestras cosas. Conforme bajamos aumenta el calor. Vamos reponiendo el agua en las regatas y fuentes que encontramos. Bebemos mucho, el día es caluroso. Llegamos al avituallamiento a las 16:30 y encontramos a Fernando (52 Km.). Comemos, bebemos, nos cambiamos de camiseta y calcetines. Jorge cambia sus zapatillas por unas de Fernando. Le están un poco grandes, pero no puede seguir con las suyas.
  Fernando sale por delante. Nosotros estamos algo más de media hora y a las 17:05 seguimos a por la penúltima subida del día. Este tramo está muy bien marcado. Empezamos con mucho calor y encontramos nieblas en la parte superior. Llegamos a la cota 1.800 entre nieblas y tenemos 2 o 3 Km. de sube y baja hasta el control de Géles. De ahí bajar al Valle de Artiga de Lin en la cota 1.100. Ha empezado a llover ligeramente pero no lo suficiente para ponernos ropa, hace calor y casi no moja.
  De aquí tomamos la carretera que nos lleva a las cabañas y refugio de Artiga de Lin, tres kilómetros. Se ha puesto a llover, cae un poquito de granizo, pero hay suerte y estamos debajo de un gran haya que nos protege. Nos ponemos el chubasquero y continuamos tranquilamente bajo la lluvia. Llegamos al control a las 20:05. Nos dicen que vamos sobre el puesto 45. Sorprendidos seguimos, ya por camino, a por la última subida fuerte del día, el puerto de la Picada (2.477 m.). 
  Sube y sube, las pocas fuerzas que quedan sólo permiten un ritmo cansino. La sensación es de ir lentos. Estamos a punto de liarla y salirnos del camino, pero Jorge ve que la dirección que cogemos no es la buena y comprobamos el track. Han sido 100 m. sólo así que volvemos al camino enseguida. Me dan ganas de pararme en un par de ocasiones, pero tras amagar continúo. Jorge sin problemas. Para de llover a ratos y vuelve a arreciar sobre las 21:00, como decían las previsiones. Va llegando la noche y con ella el Puerto y punto de control. Son las 21:46 y estamos en el Km. 73.
  Ha dejado de llover, nos ponemos el frontal, apretamos las zapatillas y comenzamos a bajar con Jesús y Gonzalo, dos compañeros de fatigas con los que decidimos compartir el final.
  Terreno magnífico para bajar deprisa. Camino bueno de tierra sin una pendiente demasiado acusada. Nos cruzamos con participantes de las otras dos pruebas que comparten macizo, ‘La maratón del Aneto’ y ‘Las dos caras del Aneto’. En total 1.100 participantes.
  Buen ritmo de bajada, trotando en casi todo el rato salvo en pequeñas subidas. Llegamos al Hospital de Benasque (22:45) y de ahí remontamos para coger el lado sureste del Valle de Benás. Media ladera descendente hasta los Baños de Benasque (23:40). Tomamos una buena pista hasta encontrar la entrada a Ballibierna (00:12). Desde este punto el camino coincide con el recorrido por la mañana desde Benasque. Alternamos correr con andar hasta ver las luces del pueblo. En este punto se apodera de nuestros compañeros una fiebre que les hace correr como si acabásemos de salir. Jorge y yo nos damos un abrazo bajo el arco de meta y damos la llegada con el SportIdent. Son las 00:55 aproximadamente.
  Fernando nos está esperando y ya ha encargado una pizza. Buen ambiente en la llegada. Comemos, bebemos, compartimos lo vivido con otros participantes. Comemos un trozo de pizza de Fernando por el cariño con el que nos la ofrece, aunque tengo la sensación de que la voy a vomitar. 
  Empezamos a tener frío, así que nos vamos a la ducha, templada como siempre, y de ahí, a las 2:00, a la autocaravana de Fernando donde no pegamos ojo por el cansancio, los dolores y el gel con cafeína que me había tomado. Muchas gracias Fernando, nuestra alternativa era echar los asientos del coche hacia atrás.
  A las 8:00 diana. Desayunar un zumo, tostadas con jamón y café o cola-cao y echar un vistazo a las clasificaciones. Jorge el 39 y yo el 40, pero nos creemos con derecho al puesto 36 que fue el primero de la ‘grupeta’ que compartimos desde la Picada.
  Llamada para recordar nuestro amor incondicional a nuestras parejas y que llegábamos a casa para las 13:00. El que vale para correr también para disfrutar con la familia.
  Buenas sensaciones para nuestros objetivos del año.
  Eric y Paski van a sufrir intentando seguir a Jorge en Chequia, ya pueden entrenar fuerte.
  Este ‘ensayo general’ me ha dejado buen sabor de boca y la moral alta para ir a Chamonix y dar otra ‘vueltica’ en esa ocasión junto a Fernando y Mikel.
  Recordad que ’Tres Valls’ está a la vuelta de la esquina, ir poniéndoos fuertes, no os abandonéis a la cervecita y los chopitos en las terrazas.
  Buen verano, salud,
  Carlos

  P.D.: El equipo 'CDN Trail' queda en 5º lugar.